El imán de heladera se arrastra por el suelo, ignorante de las leyes de la física, con la lentitud de las cosas sin poder, con el rumbo fijo de las cosas poderosas, a un centímetro de la línea oscura que separa las baldosas, portando el estandarte de pizzería, orgulloso a su manera, sin timidez, como si hubiera encontrado el amor de su vida.
Una existencia sin sentido la de los imanes.. siempre atraidos hacia donde no quieren ir.. hacia su opuesto..
ese amigo del ocio, que no te deja cocinar 🙂
inventen algo mejor huuuuuuuuuuuuu!!!!!
jajaja…toy buscando informacion sobre la heladera y termine aca, si sabes algo sobre las heladeras, no dudes en decrime!
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