Categoría: Como agua

Playa Blanca

Una chica lee Como agua en la Biblioteca Popular de Playa Blanca, isla de Barú, Cartagena de Indias, Colombia. Gabriela Galíndez Vásquez, que participó en un taller que hice para la biblioteca Juanito Laguna y me mandó la foto, por la que estoy muy agradecido, es quien gestiona la biblioteca.

Esto es lo que tiene que decir Google Maps al respecto:

[googlemaps https://www.google.com/maps/embed?pb=!1m16!1m12!1m3!1d75452.58108943874!2d-75.64527809999997!3d10.186164400000093!2m3!1f0!2f0!3f0!3m2!1i1024!2i768!4f13.1!2m1!1splaya+blanca%2C+baru!5e1!3m2!1sen!2sar!4v1510153016112&w=600&h=450]

Y acá está Gabriela en YouTube, explicando de qué se trata:

[youtube https://www.youtube.com/watch?v=D2nz-DarLfU]

Otra reseña de Como agua

En Había una vez, revista chilena de literatura infantil y juvenil, Gonzalo Oyarzún escribió una hermosa reseña de Como agua.

“Pero a veces también aparecen libros, apenas visibles, como para pasar inadvertidos entre los demás libros. Libros así, como casi nada. Libros que, a no ser que una amiga te los obsequie como regalo de pre-cumpleaños, ni siquiera te permiten escribir esta columna. Justo hablo de uno de esos libros. Libros que no lees, sino que te suceden. Libros que no pasan, sino que se quedan. Libros en los que te sumerges y no sales sin que te mojen.”

Reseñas de Como agua

Es un placer leer lo que otras personas escriben sobre lo que uno ha escrito. Lo que es más cierto todavía cuando se trata de Como agua, el libro-álbum que hicimos Cecilia Afonso Esteves y yo, y que publicó Libros del Eclipse en 2009. La razón es que Como agua no tiene nada de lineal o inequívoco, es un libro hecho para despertar ideas, un llamado en la oscuridad para el que cada uno puede tener una respuesta diferente.

Allá por mayo apareció en Imaginaria una reseña de Como agua escrita por María Teresa Andruetto. Fragmento:

“Los libros de poemas son aves extrañas en el universo de la LIJ, tal vez porque en ellos se ve más que en ningún otro género cómo las palabras se desvían de la referencia, se distraen de lo inmediato y de lo utilitario, se ponen a ‘hacer otra cosa’. Así, un libro en el que habite la poesía, resulta inútil para toda demanda que no sea la de internarse en los pliegues del lenguaje, que no sea la de dejarse llevar uno mismo a sentir y a pensar.”

Ahora encontramos otra reseña en el blog poeticasinfancia, firmada por Melisa. Fragmento:

“A través de la prosa poética y de las imágenes sensibles, que nos rodean con sus colores tenues, podemos iniciarnos en la búsqueda íntima del sentido, volviéndonos universales, solitarios, simples como el agua. Pero esta búsqueda se inquieta y se tensa, porque apela y necesita un lector capaz de insertarse en una actividad de desciframiento y construcción. Son los lectores quienes deben reescribir con su lectura lo que proponen los autores. Sólo así, el libro álbum se completa, saliendo de sus páginas y retomando con el pulso del lector.”

Desde este rincón, nuestras gracias a las reseñadoras. El libro ya no es sólo el libro, es el libro más las lecturas que recibe.

(Foto por Cecilia Afonso Esteves.)