Sturgeon, Theodore, El hombre sintético (The Dreaming Jewels), Cenit, Barcelona, 1961. 11.5 x 17 cm.
Categoría: 7. Lo demás
La Asociación de Literatura Infantil y Juvenil de la Argentina (ALIJA) eligió mi novelita Quiero escapar de Brigitte entre sus Destacados 2007. Los fundamentos que dio el jurado son un placer:
Un planeta llamado Brigitte y el deseo de escapar de allí es la célula madre de esta novela de ciencia ficción, género en que el autor se mueve con absoluta soltura y destreza. El dominio de sus leyes genéricas tanto en el terreno literario como en sus manifestaciones en otros sistemas culturales (cine, historieta, etc.) se observa en el ejercicio paródico y humorístico que invita a revisitar escenas y procedimientos que pueden reconocer los habitués del género o ser el primer escalón para los que incursionan en él por primera vez. Gimenez con audacia y prosa original construye una voz de alguien que es presa de una misión y un deseo ajenos. Propone al lector que se sorprenda a cada paso junto con el narrador de los designios inasibles de una voluntad que revela gradualmente sus propósitos. Al ritmo de esta complicidad tapizada con las vertiginosas metamorfosis de quien cuenta es posible encontrar escenas de gran poder visual, casi cinematográficas.
En la lista completa de los Destacados (que acaba de aparecer en Imaginaria) hay muchas joyas.
Verne, Julio, 20.000 leguas de viaje submarino, Editorial Tor, Buenos Aires, 1957. 15 x 22. 5 cm.
Dumas, Alejandro, El Vizconde de Bragelonne, Tomo 1°, Editorial Tor, Buenos Aires, 1957. 15 x 22.5 cm.
Pasa en todos los blogs. Uno hace un post inocuo, como tantos otros, y de pronto, por alguna razón inesperada, se llena de comentarios que no tienen nada que ver. El tema se potencia porque los posts con muchos comentarios le gustan a Google, y entonces cada vez hay más visitas, más comentarios, más Google, y así.
En algunos casos, los comentarios vienen bien. Son como plantas que crecen en una pared abandonada. El mundo se apodera del post y lo convierte en otra cosa, mejor y más útil.
En general pasa lo contrario. Este blog tiene varios casos. Uno de ellos, el número trece de la sección Personajes del barrio, llegó a un extremo que decidí no aceptar. Los insultos, la intolerancia, la ignorancia, la estupidez que acumulan los 174 comentarios aparecidos hasta hoy son demasiado para mí. Este blog (ningún blog) está obligado a recibir tanta basura. La libertad de expresión (que valoro inmensamente) consiste en que cada uno puede decir lo que quiera en su propio espacio, no en el de los demás.
El WordPress (programa con que administro este post) no ofrece una forma sencilla de borrar todos los comentarios de un post. De manera que pasé el post a “no publicado” y lo armé de nuevo: la misma foto, publicada con la misma fecha, con un título levemente cambiado (para que no se repita el fenómeno). Además, ese nuevo post no admite comentarios.
Quien quiera darse el gusto de mirar por qué hice esto, puede recurrir a una imagen que capturé, que contiene el post original y los 174 comentarios: está aquí, a un click de distancia (si aparece chica en el navegador, haciéndole un click se agranda a tamaño natural). Imagen y no texto, para que Google no vuelva a encontrarlo y el ciclo no se repita.
(De paso, también cambió la dirección del post. En la anterior, lamento decir, ahora aparecerá un triste “página no encontrada”.)
¿Y por qué no fui moderando la cosa a medida que ocurría? Por otorgar la mayor libertad posible a quienes pasan por aquí. Los únicos comentarios que vengo borrando sistemáticamente en este blog son los que insultan a mi hijo (de quien publiqué muchos dibujos). Eventualmente puedo borrar algún otro por razones muy particulares (en general porque insultan a alguna otra persona). Empiezo a creer que me equivoqué, y que hay que usar un criterio más estricto.
Hay otros posts por aquí que son candidatos al mismo tratamiento. Lo iré viendo.
Verne, Julio, La vuelta al mundo en 80 días, Editorial Sopena Argentina, Buenos aires, 1950. 14.5 x 22 cm.
Rieseberg E., Harry, Tesoros el el fondo del mar, Ediciones Peuser, Buenos Aires, 1961. 16 x 22. 5 cm.
Nueva dimensión N° 12, Noviembre-Diciembre 1969, Ediciones Dronte, Barcelona. 17 x 20 cm. Abajo, la página 45.
Pepín Cascarón, Año 1, N° 1, Editorial Dante Quinterno S. A., Buenos Aires, junio de 1960. 14 x 19 cm.
Simenon, Georges, Maigret Vacila – Stain, el asesino – La noche de la encrucijada, Ediciones Orbis Hyspamerica, Madrid, 1985. 13 x 20 cm.