Con el tiempo, como un gas, YouTube va llenando todo el espacio disponible. Lo digo en buen y mal sentido. En bueno porque aparecen cosas valiosas, que me alegro de poder ver. En malo, porque contribuye a que no deje de hacer pavadas en la compu.
Por el lado bueno, comparto algunos videos que vi en los últimos días.
Video alucinado y “glitchy” sobre música electrónica alucinada y “glitchy” (vía kottke.org):
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=2jTg-q6Drt0]
Una canción de Andrew Bird, reciente, que no conocía (me la pasó mi hijo Gabriel):
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=3yzNN3Zukl8]
Guía para resolver el último nivel (difícil) del más reciente jueguito en Flash que me atrapó (la guía empieza con otros niveles, que ya había resuelto solo):
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=2-IkgHTgOTw]
Reencuentro, tras un cuarto de siglo sin escucharla, con una canción de Robin Williamson (ok, esto es audio con una imagen fija, no video; para video, más abajo va una versión en vivo, incompleta, por un Robin treinta años más viejo):
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=f8y7fxO2c-E]
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=6rIiz6k208w]
Y este muestreo es así nomás, espontáneo, de memoria, porque se me acaba de ocurrir, y cubre un par de días. Si hubiera tomado notas, pasado más tiempo acumulando, permitido que YouTube recordara qué vi, la lista de buenos momentos sería más grande y variada.