Nos pusimos a hacer una canoa de madera
y otra canoa en un papel
y una canoa de pasto
y otra de metal fundido
y también hicimos un río para poner las canoas
y otro río que nos quedó adentro por mal plegado
y tantos ríos y canoas nos cambiaron el sueño
y nos hicieron pensar en la muerte
y nos desencaminaron
y así fue que salimos a andar por los charcos de la avenida
y no volvimos hasta el día siguiente
y las canoas se habían extinguido
y nos daba mucha sed.
Impresionante
Gracias, Diablitos. Me vino bien tu comentario.
Me gusta muchísimo esto de las canoas.
Hermoso ingenioso, comousted
bah
beso
Gracias, Ceci. ¡Qué bueno que viniste por acá!